Pol Granch suspende su concierto en Huelva por motivos de salud.
Pocas trayectorias tan deslumbrantes contempló 2019 como la de Pol Granch. De joven promesa a uno de los nuevos artistas más importantes del momento. Con su desbordante sensibilidad por bandera y unas canciones tan emocionantes como versátiles, Granch es el músico aparte que prometía ser cuando despuntaba el pasado año y una de las apuestas más convincentes para el que acaba de comenzar.
De padre francés y madre española, Pablo Grandjean –su verdadero nombre– encara el futuro más próximo con su disco de debut a la vuelta de la esquina. Será un álbum cargado de energía, igual que él, y con esa variedad estilística que le permite transitar del pop al trap y del rap al rock. “Si una canción es una balada y otra es una que no tiene nada que ver, pues que así sea”, sostiene este madrileño de 1999, que con Late, su primer single, avisó al mundo de que estaba aquí para quedarse.
Pol Granch actuará en el Gran Teatro de Huelva el próximo 5 de noviembre
2020 será también el año de su gira. Su asalto en diciembre al Cool Stage madrileño, en el que agotó en pocos días las entradas, le ponen en el camino de un directo listo para pasearse por España y seguir la estela de éxitos. Llegaba el concierto de Madrid con la publicación reciente de M conformo, otra de las joyas –como Te quiodio, Perdón por las horas o Desastre– que han salpicado el año de su confirmación.
Son canciones que ratifican la evolución que le ha convertido en el gran artista emergente, un Pol Granch que deja atrás el Factor X que le dio a conocer para concretar estilo y personalidad. Sabía que quería ser músico incluso cuando comenzó sin demasiado convencimiento sus estudios de Marketing. Casi de casualidad se lanzó a la piscina del popular talent show, y lo que vino después es bien conocido: una reñida competición, un premio quizás inesperado, y la locura total.
Granch no tardó en ponerse a trabajar a las órdenes de David Santisteban y Paco Salazar, productores de su EP debut. Así fue como empezó a convertir en profesión esa pasión que arrastra desde niño, transmitida por unos padres que le inculcaron el amor a la música. En el estudio afloró la pluralidad que le caracteriza, propia de quien admira tanto a Izal como a Ed Sheeran o XXXTentacion. Indie, pop, trap… Pero hay más. Le gustan las baladas, el flamenco, la música urbana, el rock…
Lejos de diluir a Pol Granch, todo ese bagaje resulta uno de sus principales encantos. Con el castellano como referencia, pero con un perfecto francés como idioma alternativo, Granch encara un futuro que le permite pensar que todo cuanto desee se puede hacer realidad.