Estamos ante una familia formada por una madre viuda (Isabel), un hijo (Javier) que acusa una carencia afectiva, y una abuela (Adela) que empieza a dar síntomas de confusión y olvido propios de la vejez, antes de emprender el último viaje. Este aspecto provoca momentos de triste comicidad.
Obra de teatro que reivindica la figura y el amor de las abuelas.
La abuela, sumida en una torpeza intelectual, se aferra a sus recuerdos de juventud e irán apareciendo personajes de su pasado, mostrando una especial generosidad y una emocionante ternura, que servirá de anclaje para que su nieto vaya despejando los fantasmas y demonios que generan en él actos de auténtica violencia.
En medio de todos está Isabel, viuda desde muy joven, que lucha desde el desconcierto, desde el cansancio pero también desde el amor, para cuidar de su madre y rescatar a su hijo.
Al final será la ternura el lazo que hará que nuestros personajes encuentren el camino de la estabilidad y les permita disfrutar momento de felicidad, entre risas y reflexión.
Protagonizada por María Garralón, Víctor Palmero y Mariola Fuentes, Háblame reivindica la figura y el amor de las abuelas. Y lo hace a través de una familia formada por una madre viuda, un hijo desestructurado y una abuela que empieza a dar síntomas de confusión y olvido, aspecto que provocará «momentos de una triste comicidad», aseguran.
La abuela, sumida en una torpeza intelectual, se aferra a los recuerdos de su juventud y, sobre el escenario, irán ‘apareciendo’ personajes del pasado como su marido, sus padres…, y todos «viajarán por su memoria mostrando una especial generosidad y una emocionante ternura», que servirá de anclaje para que su nieta despeje sus fantasmas.